¿No es maravillosa la promesa que Dios ha hecho a sus hijos? Poder contar con su compañía de manera perpetua en el hoy y el mañana, ¿No es motivo de regocijó? ¡Seguro que lo es!
La libertad de expresión es un derecho fundamental que tiene todo ciudadano. Todo ciudadano puede manifestarse y expresar su desacuerdo de múltiples maneras incluso empleando el arte como un modo de expresión.
Para muchos las riquezas son sinónimo de felicidad y el que así piensa cree que la felicidad esta determinada por los bienes que tengamos, cuando en realidad la verdadera felicidad se encuentra solo en Dios.