E

s impresionante el llamado y conversión que Dios hace a Abrahán, siendo este hombre de 75 años de edad, residiendo en mor de los caldeos, una nación idólatra. Casado con Sara, mujer estéril, sin descendencia, pues no tenía hijos. Y para colmo de males, Dios le da la orden de salir de su tierra y de su entorno familiar a una tierra que Dios le mostraría. El plan del Señor fue utilizar a este hombre con todas sus frágiles características para crear una gran nación cuyo nombre es Israel. De este hombre, Hebreos capítulo 11 versículos ocho al diez dice Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia. Y salió sin saber a dónde iba. Por la fe habitó como extranjero en la tierra prometida, como en tierra ajena, morando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa. Porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. Andar de la mano con Dios fue hábito de la vida de Abrahán. Dondequiera que llegaba, edificaba un altar y allí invocaba al Señor.

Transcripción del video hecha por Albert Cuadrado. Es posible que encuentre errores mínimos. Nos esforzamos en proveerle la mejor transliteración del contenido en video. Síganos en youtube.
Adorando a Dios en familia audio.

Dios fue su esperanza, deleite y fortaleza. Dios ocupó el centro de la familia de Abraham. Toda familia necesita apartar tiempo diariamente para adorar a Dios y deleitarse en su presencia. Consideremos varias cosas. En primer lugar, apartemos tiempo a diario para adorar a Dios. Qué cosa hace posible un matrimonio de unidad, entendimiento y amor? Esta clase de matrimonio es el resultado del compromiso de trabajar arduamente por el resto de la vida matrimonial y de una confianza profunda en la gracia transformadora de Dios. La adoración a Dios es la única cosa que nos llevará a obtener un serio compromiso de trabajar por el matrimonio y confiar en la gracia de Dios. La adoración podría ser definida como darle toda gloria, honra, honor, alabanza a un ser superior o a un ser a quien consideramos superior. La adoración requiere esfuerzo intencional, pues el corazón ha de estar dispuesto a enfocar toda su atención en Dios, nuestro Creador y Sustentador. Jesucristo dijo Porque donde está vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón. Si tu tesoro es Dios, tu corazón estará en Dios y en tu familia

Jehová nuestro Dios será el rey. En segundo lugar, hagamos el esfuerzo intencional de instalar en nuestro hogar el altar familiar. La función principal de los padres es criar hijos en la disciplina y amonestación del Señor. Nuestra responsabilidad como padres es orientar el corazón de nuestros hijos hacia Dios. Y tal orientación sólo es posible cuando exponemos el corazón de los hijos al Evangelio de Jesucristo. Cualquiera que sean las influencias formativas de la vida, es la orientación hacia Dios la que determinará la respuesta del niño a esas influencias formativas. Cuando instruimos al niño en el Evangelio, el temor a Dios resultará de su conversión a Cristo. Si no instruyes al niño, su vida será sin temor y reverente. Será un impío. Todo ser humano fue diseñado para adorar. Unos adoran a Dios nuestro Salvador. Otros adoran a Satanás. Tus hijos evalúan todas las experiencias de la vida por un filtro religioso. Esto es responsabilidad instruir el corazón de tu hijo usando las Sagradas Escrituras. Saca el tiempo a diario para celebrar un devocional. Toma tiempo a diario para orar por tus hijos y para orar con tus hijos en tu hogar. Edifica el altar donde Dios sea el centro de tu vida familiar.

Asistente de edición Albert Cuadrado para propósitos de ser incluido en este blog.


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