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a nación de Israel existiría a partir de Isaac, la descendencia de Abraham, hijo legítimo, nacido en plena vejez, siendo sus padres de cien años.

¿Qué pasaría por tu mente si a la hora de visitar un hospital y llegar hasta la sala de urgencias una mujer de noventa años acompañada de su marido de cien años solicitan los servicios de un ginecólogo?, pues esta mujer llega hasta allí con dolores de parto. Sería cosa de locos, ¿verdad? Esta fue una historia real con personajes de carne y hueso. Cuenta la historia bíblica que Abraham, siendo de setenta y cinco años y Sara, su mujer de sesenta y cinco, de Dios mismo, recibieron la promesa de ser padres. Evento que tuvo lugar veinticinco años después de haber recibido tal promesa. A partir de Abraham Dios da lugar conforme a su plan el nacimiento de la nación de Israel para que este plan tuviese lugar. El Señor concedió al patriarca Abraham en plena vejez, un hijo, quien recibió por nombre Isaac. Dice Génesis 21:1-5, "Visitó Jehová a Sara, como había dicho, e hizo Jehová con Sara como había hablado". Sara concibió y dio a Abraham un hijo en plena vejez, en el tiempo que Dios le había dicho.

La transcripción del video fue hecha por Albert Cuadrado. Es posible que encuentre errores mínimos. Nos esforzamos en proveerle la mejor transliteración del contenido en video. Síganos en youtube.

Y llamó Abraham el nombre de su hijo, que le nació, que le dio a luz Sara, Isaac. Y circuncidó Abraham a su hijo Isaac, de ocho días, como Dios le había mandado. Y era Abraham de cien años cuando nació Isaac, su hijo. Cuestionemos por un momento la historia. En primer lugar, ¿Quién era este Isaac? Dios es un ser que ejecuta sus planes a través de medios. La nación de Israel existiría a partir de Isaac, la descendencia de Abraham, hijo legítimo, nacido en plena vejez, siendo sus padres de cien años. El nombre Isaac significa risa. Su madre Sara al escuchar de boca del ángel la promesa dada a Abraham de que tendría descendencia en plena vejez, dudó de tales palabras, y en su corazón se ríe, burlándose de las palabras que había escuchado. Ella dudó de sí misma. Tenía sesenta y cinco años cuando Dios prometió a Abraham otorgarle descendencia, y ya tenía ochenta y nueve cuando escuchó directamente de la boca del ángel enviado de Dios las palabras que confirmarían que el año siguiente ella sería la madre del hijo de la promesa.

Jehová nuestro Dios es el Dios de lo imposible. En segundo lugar, ¿Cuáles fueron los frutos de Isaac? Recuerda que Sara era estéril y entrada en edad. Y aunque dudó en su corazón, el Dios de lo imposible concedió deleite a esta pareja de ancianos y otorgó, a través del nacimiento de Isaac, una nación, Israel, el pueblo que sería la cuna del Salvador, nuestro Señor Jesucristo. El parto sobrenatural de Isaac fue el resultado del pacto que realizó Jehová nuestro Dios con Abraham y que selló la elección del pueblo judío como receptor de la ley divina. De Isaac nacen los gemelos Esaú y Jacob. Este último obtiene por engaño la primogenitura de su hermano, quien al parecer no entendía el privilegio de ser primogénito. Privilegio que intercambia por un plato de lentejas a su hermano Jacob. Dios concede a Jacob doce hijos, quienes vinieron a ser los patriarcas de la tribus de Israel. De esa descendencia en su tiempo nace Jesucristo, el Hijo de Dios, por medio de quien vino al mundo la gracia y la verdad.

De esta historia aprendemos dos cosas:

  • En primer lugar, Dios es fiel y cumplirá sus palabras al pie de la letra. Dios es el Dios de lo imposible.
  • En segundo lugar, Jehová nuestro Dios es un ser en quien tu puedes confiar.¿Confía usted en Dios? Sara concibió y dio a Abraham un hijo en su vejez. En el tiempo que Dios le había dicho.

Asistente de edición Albert Cuadrado para propósitos de ser incluido en este blog.

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5/27/22
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