La Iglesia: Retos y Desafíos II

a sana doctrina posee el atributo de formar el carácter del hombre. Cuando una iglesia ha sido formada en la sana doctrina, a la hora de tomar decisiones, la Palabra de Dios será su guía exclusiva. Entre los retos que tiene la Iglesia de Jesucristo, creo que la formación y estabilidad de las familias es el segundo reto de importancia a trabajar en la iglesia local. Deuteronomio capítulo seis versículos uno y dos dice Éstos, pues, son los mandamientos, estatutos y decretos que Jehová vuestro Dios mandó para que os enseñase, para que los pongáis por obra en la tierra a la cual pasáis vosotros para tenerla. Para que temas a Jehová tu Dios, guardando todos sus estatutos y sus mandamientos que yo te mando, tú, tu hijo, y el hijo de tu hijo todos los días de tu vida, para que tus días sean prolongados. En este texto encontramos algunos principios. En primer lugar, a Dios le interesa que nuestros hijos se levanten como una generación que tema a su Palabra. La familia es el centro de la sociedad.

Transcripción del video realizada por Albert Cuadrado. Es posible que encuentre errores mínimos. Nos esforzamos en proveerle la mejor transliteración del contenido en video. Síganos en youtube. Asistente de edición Albert Cuadrado para propósitos de ser incluido en este blog.

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‍Cada sociedad es impactada por la generación que la integra. Una generación es toda la gente que nace y vive más o menos al mismo tiempo. Aunque cada generación es distinta la una de la otra. Se espera que la generación más antigua tenga fuertes influencia sobre la generación más joven. En el texto que tenemos en estudio. Dios espera que nuestra generación tenga fuerte influencia en los jóvenes que nos han de sustituir y que sembremos en sus corazones el temor al Señor. Hay generaciones que se caracterizan por la violencia, por la inmadurez, por la falta de compromiso, la falta de temor a Dios, la ausencia de valores permanentes, el irrespeto a las autoridades establecida por Dios, la ausencia de estos elementos no llegan de manera automática los padres. El elemento de mayor influencia en cada sociedad. Fuimos diseñado para que en la crianza trabajemos intencionalmente con el corazón de nuestros hijos y así levantar una generación temerosa a nuestro Dios. En segundo lugar, en nuestro reto como iglesia debemos tomar muy en serio que nuestro desafío no surge de manera automática.

Hemos llegado a pensar que la visita de nuestros hijos a la Iglesia resultará en un automático recurso para que ellos lleguen al conocimiento de la verdad. Aún hemos llegado a pensar que es responsabilidad de la Iglesia enseñar a nuestra descendencia el camino de la verdad. La realidad. En la crianza de nuestros hijos descansa el trabajo de los padres para que conozcan a Jesucristo. La iglesia local es un apoyo al trabajo que los padres realizan en el contexto del hogar y en el contexto de la vida diaria. El mandato de Dios es que pongamos en acción todo cuanto hemos escuchado en el Evangelio. Observemos que el mandato es práctico en todo el sentido de la palabra. Toma en cuenta cuatro cosas. En primer lugar, aparta un tiempo diario para orar, leer tu Biblia y con la ayuda del Espíritu Santo, aplicar estas enseñanzas a tu corazón como Padre. En segundo lugar, aparta el tiempo diario para celebrar un devocional familiar con tu familia. El altar familiar es indispensable para que los nuestros escuchen de tus labios el evangelio de Jesucristo. En tercer lugar, si no eres miembro de una iglesia local, procura con diligencia hacerte miembro de una iglesia donde tu alma y la de tu familia sea pastoreada.

En cuarto lugar, no dejes de congregarte en una iglesia local. Jesucristo visita la iglesia cuando nos reunimos a adorarle. Estas palabras que yo te mando hoy estarán sobre tu corazón.

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